Introducción
El bizcocho de vainilla es un clásico que nunca pasa de moda. Su sabor suave y su textura esponjosa lo convierten en la opción ideal tanto para disfrutar solo como para usar de base en otras preparaciones. Ya sea para una merienda, una celebración especial o simplemente para acompañar una taza de café o té, este pastel es una apuesta segura. Su versatilidad permite decorarlo con azúcar glas, crema batida, frutas frescas o incluso rellenarlo con mermelada o glaseado. A continuación, te mostramos cómo preparar este delicioso postre casero.
Ingredientes
- 1 taza (120 g) de harina común
- 1 taza (200 g) de azúcar granulada
- 4 huevos grandes a temperatura ambiente
- 1/2 taza (115 g) de mantequilla sin sal, derretida
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1/2 cucharadita de polvo para hornear
- Una pizca de sal
- Azúcar glas para espolvorear (opcional)
Instrucciones
1. Precalentar el horno y preparar el molde
Comienza precalentando el horno a 175 °C (350 °F). Engrasa un molde redondo de 20 cm (8 pulgadas) con mantequilla y espolvorea un poco de harina para evitar que el bizcocho se adhiera. También puedes cubrir la base con papel pergamino para un desmoldado más sencillo.
2. Batir los huevos y el azúcar
En un bol grande, casca los huevos y agrégales el azúcar. Con ayuda de una batidora eléctrica, bate la mezcla a velocidad media-alta durante 5-7 minutos, hasta que los huevos doblen su volumen y adquieran un tono pálido. Este paso es clave para lograr un bizcocho aireado y esponjoso.
3. Incorporar los ingredientes húmedos
Agrega el extracto de vainilla e incorpóralo suavemente. Luego, vierte la mantequilla derretida en forma de hilo mientras mezclas con movimientos envolventes, evitando que la masa pierda aire.
4. Tamizar e integrar los ingredientes secos
En un recipiente aparte, tamiza la harina, el polvo para hornear y la sal. Agrega esta mezcla a los huevos batidos en tres partes, mezclando con una espátula y movimientos suaves para no desinflar la preparación.
5. Hornear el bizcocho
Vierte la masa en el molde preparado y nivela la superficie con una espátula. Hornea durante 20-25 minutos o hasta que, al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. El bizcocho debe estar dorado en la parte superior y recuperar su forma al presionarlo ligeramente.
6. Dejar enfriar
Una vez horneado, retira el molde del horno y deja reposar el bizcocho durante 10 minutos. Luego, desmóldalo con cuidado y colócalo sobre una rejilla para que se enfríe completamente.
7. Servir y disfrutar
Antes de servir, espolvorea un poco de azúcar glas para darle un toque elegante. Puedes degustarlo solo o acompañarlo con crema batida, frutas frescas o tu glaseado favorito.
Conclusión
Este bizcocho de vainilla es la elección perfecta para cualquier ocasión. Su textura suave y su sabor delicado lo convierten en un postre versátil que se puede disfrutar de muchas formas. Ya sea como base para un pastel más elaborado o como un dulce sencillo para la hora del té, esta receta te garantiza un resultado delicioso y esponjoso. ¡Anímate a prepararlo y disfruta de su inconfundible sabor casero!