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Croissants Caseros de Jamón y Queso

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Introducción:

Déjate conquistar por el aroma irresistible y las capas hojaldradas de un croissant recién horneado con jamón y queso. Este clásico de la pastelería francesa ha ganado popularidad en cocinas de todo el mundo. Aunque hacerlos desde cero puede parecer complicado, con un poco de paciencia y dedicación, podrás preparar tus propios croissants dorados y rellenos de sabor. Esta receta te guiará paso a paso para que logres un resultado delicioso, crujiente y perfectamente casero.

Ingredientes:

Para la masa:

  • 2 y 1/4 cucharaditas (1 sobre) de levadura seca activa

  • 1/4 taza de agua tibia (aproximadamente 43°C)

  • 1 taza de leche entera tibia

  • 1/4 taza de azúcar

  • 3 y 1/4 tazas de harina de trigo (todo uso)

  • 1 cucharadita de sal

  • 1 taza de mantequilla sin sal, fría

Para el relleno:

  • 1/2 libra de jamón en lonchas finas

  • 1 taza de queso Gruyère o suizo rallado

Para el dorado:

  • 1 huevo batido

  • 1 cucharada de agua

Instrucciones:

  1. Activar la levadura: En un bol pequeño, mezcla el agua tibia con la levadura. Deja reposar de 5 a 10 minutos hasta que se forme una espuma.

  2. Preparar la masa: En un bol grande, mezcla la leche tibia con el azúcar. Añade la levadura activada y remueve. Incorpora poco a poco la harina y la sal hasta formar una masa. Amasa sobre una superficie enharinada hasta obtener una textura suave. Envuelve en plástico y refrigera durante 1 hora.

  3. Incorporar la mantequilla: Estira la masa fría formando un rectángulo. Coloca la mantequilla entre dos papeles de hornear y aplánala hasta que tenga el mismo tamaño que la masa. Coloca la mantequilla sobre una mitad de la masa y cubre con la otra mitad. Realiza tres vueltas simples (dobla, estira, refrigera), dejando reposar en frío entre cada una. Refrigera durante 1 hora.

  4. Seguir doblando: Repite el proceso de doblado tres veces más, siempre enfriando entre cada vuelta. Tras la última, deja reposar la masa en el refrigerador al menos 4 horas o toda la noche.

  5. Formar los croissants: Estira la masa en forma de rectángulo y córtala en triángulos. En cada triángulo, coloca una loncha de jamón y un poco de queso. Enrolla desde la base ancha hacia la punta y curva ligeramente los extremos para formar la clásica media luna.

  6. Leudar: Coloca los croissants en una bandeja forrada con papel vegetal. Déjalos leudar en un lugar cálido entre 1 y 2 horas, hasta que doblen su tamaño.

  7. Precalentar y pincelar: Precalienta el horno a 200°C. Mezcla el huevo batido con el agua y pincela cada croissant con esta mezcla.

  8. Hornear: Hornea entre 15 y 20 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes. Gira la bandeja a mitad de cocción para que se horneen de forma pareja.

  9. Enfriar y disfrutar: Deja enfriar los croissants unos minutos sobre una rejilla antes de saborearlos. Disfruta de cada capa crujiente y del sabroso relleno.

Conclusión:

¡Felicidades! Has logrado preparar croissants caseros de jamón y queso dignos de una panadería francesa. Comparte esta delicia con tus seres queridos y celebra el arte de la repostería con orgullo. Acompáñalos con una buena taza de café o té, y transforma cualquier desayuno o brunch en una experiencia gourmet. ¡Bon appétit!