Introducción
¿A quién no le gusta disfrutar de unas galletas caseras listas en pocos minutos? Esta receta es ideal para cualquier ocasión: una merienda rápida, un detalle especial para invitados o un acompañamiento perfecto para el té o el café. Lo mejor es que solo necesitas unos pocos ingredientes y el proceso es tan sencillo que querrás hacerlas una y otra vez. ¡Manos a la obra!
Ingredientes:
- 2 tazas de harina de trigo
- 1 taza de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
- 1/2 taza de azúcar glas
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla
- Una pizca de sal
Preparación:
- Preparar la masa: En un bol grande, bate la mantequilla con el azúcar glas hasta obtener una mezcla cremosa y homogénea. Agrega el extracto de vainilla y mezcla bien.
- Añadir los ingredientes secos: Incorpora poco a poco la harina junto con la pizca de sal. Mezcla hasta obtener una masa suave. Si está demasiado pegajosa, añade una cucharada extra de harina hasta alcanzar la textura adecuada.
- Formar las galletas: Precalienta el horno a 175 °C (350 °F). Forra una bandeja con papel pergamino. Toma porciones de masa y dales la forma deseada. Colócalas en la bandeja dejando espacio entre ellas.
- Hornear: Hornea las galletas durante 10–12 minutos o hasta que los bordes comiencen a dorarse ligeramente.
- Enfriar y disfrutar: Retira las galletas del horno y déjalas reposar en la bandeja durante 5 minutos antes de pasarlas a una rejilla para que se enfríen por completo.
Conclusión
Estas galletas destacan por su sencillez y sabor irresistible. Su textura mantecosa y su dulzura equilibrada las convierten en una opción perfecta para cualquier momento del día. Acompáñalas con tu bebida favorita o disfrútalas solas. Si te han gustado, no dudes en compartir esta receta con familiares y amigos.