Palitos de Queso y Papa Húngaros Crujientes: ¡Una Delicia Irresistible para Cualquier Momento!

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Si estás buscando una receta sabrosa, crujiente y fácil de preparar, estos palitos de queso y papa húngaros serán tu nuevo antojo favorito. Son perfectos como aperitivo, para una reunión informal con amigos o como un snack delicioso para cualquier momento del día. Combinan lo mejor de las papas con el sabor irresistible del queso, y lo mejor: ¡quedan súper crujientes por fuera y cremosos por dentro!


📝 Ingredientes

  • 500 g de papas

  • 200 g de queso rallado (cheddar o mozzarella funcionan excelente)

  • 100 g de harina de trigo

  • 1 huevo

  • 1 cucharadita de sal

  • 1/2 cucharadita de pimienta negra

  • 1/2 cucharadita de pimentón dulce

  • Aceite para freír


👩‍🍳 Cómo Prepararlos

Paso 1: Cocina las papas

Pela y corta las papas en trozos medianos. Luego, cocínalas en agua con sal durante 15-20 minutos, hasta que estén bien tiernas. Escúrrelas y deja que se enfríen un poco antes de continuar.

Paso 2: Prepara la masa

Tritura las papas cocidas en un bol grande. Agrega el queso rallado, la harina, el huevo, la sal, la pimienta y el pimentón dulce. Mezcla todo muy bien hasta formar una masa suave y compacta, fácil de manejar con las manos.

Paso 3: Forma los palitos

Toma porciones pequeñas de masa y dales forma de palitos de aproximadamente 10 cm de largo y 1 cm de grosor. Puedes ayudarte con las manos ligeramente enharinadas para que no se pegue la masa.

Paso 4: Fríelos hasta que estén dorados

Calienta abundante aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Una vez que el aceite esté caliente, fríe los palitos en tandas, sin llenar demasiado la sartén. Cocínalos entre 3 y 4 minutos por lado, o hasta que estén dorados y crujientes.

Paso 5: Escurre y sirve

Retíralos del aceite y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Sirve los palitos bien calientes, tal cual o acompañados de una salsa de tu elección (¡una mayonesa con ajo o una salsa tártara van de maravilla!).


✨ Consejos para un resultado perfecto

  • No sobrecargues la sartén: fríe en tandas para que el aceite mantenga la temperatura adecuada y los palitos queden bien crujientes.

  • ¿Quieres una opción más saludable? También puedes hornearlos a 200 °C durante unos 20-25 minutos, dándoles la vuelta a la mitad del tiempo.

  • Cambia el sabor: si quieres una versión más picante, añade una pizca de ají molido o pimentón picante a la masa.


❤️ ¿Por qué te encantarán estos palitos?

Porque son una mezcla perfecta de texturas: dorados por fuera, suaves por dentro, con el toque salado y fundente del queso. Además, son súper versátiles: puedes servirlos en cenas informales, picnics, como entrada o simplemente para disfrutar de un momento de antojo.