Crujientes, dorados y con un relleno jugoso: los pasteles de carne envueltos en hojaldre son una delicia salada que conquista desde el primer bocado. Esta receta combina la suavidad de la carne molida sazonada con el toque mantequilloso del hojaldre, logrando un equilibrio perfecto entre sabor y textura.
Ideales como aperitivo para reuniones, cenas informales o incluso como opción para llevar al trabajo, estos pastelitos no solo son sencillos de preparar, sino que también ofrecen un resultado con sabor gourmet. Lo mejor de todo es que necesitan pocos ingredientes y se pueden hacer con antelación.
Ya sea que los sirvas calientes con tu salsa favorita o los disfrutes fríos como snack, ¡gustarán a todos por igual! La combinación de la corteza crujiente con el interior tierno y especiado hace que cada porción sea irresistible.
Ingredientes
-
500 g de carne molida magra
-
1 cebolla mediana, finamente picada
-
2 dientes de ajo, picados
-
1 cucharada de pasta de tomate
-
1 cucharadita de salsa Worcestershire
-
1 cucharadita de pimentón ahumado
-
½ cucharadita de pimienta negra molida
-
1 cucharadita de sal (ajustar al gusto)
-
½ cucharadita de orégano seco
-
1 huevo batido (para sellar y pincelar)
-
2 cucharadas de perejil fresco picado
-
2 láminas de hojaldre congelado, previamente descongeladas
-
1 cucharada de aceite para saltear
-
Opcional: semillas de sésamo o amapola para decorar
Preparación paso a paso
1. Cocina el relleno:
En una sartén mediana, calienta el aceite a fuego medio. Agrega la cebolla y sofríe hasta que esté blanda y translúcida (unos 3–4 minutos). Añade el ajo y saltea un minuto más.
2. Añade la carne:
Incorpora la carne molida y cocina desmenuzándola, hasta que esté bien dorada. Si hay exceso de grasa, escúrrelo.
3. Sazona al gusto:
Agrega la pasta de tomate, la salsa Worcestershire, el pimentón, el orégano, la sal y la pimienta. Cocina durante 2–3 minutos para integrar los sabores. Retira del fuego y deja enfriar unos minutos.
4. Integra hierbas y huevo:
Con la mezcla tibia, añade el perejil picado y la mitad del huevo batido. Reserva la otra mitad para pincelar el hojaldre más adelante.
5. Prepara el horno:
Precalienta el horno a 200 °C y forra una bandeja con papel vegetal.
6. Rellena el hojaldre:
Sobre una superficie ligeramente enharinada, extiende las láminas de hojaldre y córtalas por la mitad horizontalmente. Coloca una línea del relleno en el centro de cada tira.
7. Cierra los rollos:
Dobla cada tira sobre sí misma cubriendo el relleno y presiona los bordes para sellar. Puedes usar un tenedor para cerrarlos de forma decorativa.
8. Corta en porciones:
Divide cada rollo en 3 o 4 porciones iguales. Colócalos en la bandeja con la unión hacia abajo.
9. Barniza y decora:
Pincela la parte superior de cada pastel con el resto del huevo batido. Si lo deseas, espolvorea semillas por encima para dar un toque especial.
10. Hornea:
Lleva al horno por 20–25 minutos, o hasta que estén bien dorados y el hojaldre haya subido.
11. Deja enfriar y sirve:
Permite que se enfríen unos minutos sobre una rejilla antes de servir. Son deliciosos calientes, pero también se disfrutan a temperatura ambiente.
Una receta sencilla, deliciosa y elegante que se convertirá en un básico en tu cocina. ¡Pruébala y sorprende a todos!